1, 2 y 3 Juan, Judas – ¿Cómo debe un cristiano enfrentar al falso maestro?

Las epístolas de Juan y Judas presentan bastante información para el tratamiento de falsos maestros y doctrinas extrañas al evangelio. Las exhortaciones y enseñanzas acerca de los falsos maestros tienen un carácter práctico y son presentadas con un evidente sentido de urgencia. Paul N. Benware, refiriéndose al propósito de la carta de Judas, dice:

“Judas se parece mucho en contenido a 2 Pedro, excepto que el apartamiento (apostasía) que Pedro veía como futuro, Judas lo ve como algo que comienza.”

Lo anterior explica de forma general lo que se aprecia con mucho detalle en cada una de las epístolas; el uso de ejemplos y contrastes, exhortaciones y advertencias, énfasis en la obediencia a la verdad recibida por los apóstoles y palabras de ánimo a confiar en la unidad que los creyentes tienen en Cristo como único medio de protección contra el error doctrinal de los falsos maestros y las desviaciones morales como resultado de alejarse de la gracia en Cristo.

La Exhortación Intensa de Judas

En la carta de Judas, encontramos una exhortación intensa y directa contra los falsos maestros que habían sido anunciados por los apóstoles y que ahora ya se encontraban en operación en medio de la iglesia. El énfasis de esta exhortación queda de manifiesto en el versículo 3:

“…me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que os ha sido una vez dada a los santos.”

De esta manera, todos los consejos e instrucciones dadas deben ser vistos con urgencia y determinación por parte de la iglesia.

Judas acusa a hombres que convierten la libertad en libertinaje y que niegan a Dios y a Jesús (v. 4), para luego pasar a una serie de ejemplos que muestran que Dios ha ejecutado y ejecutará juicio contra quienes desprecian su palabra. En palabras de Judas, la exhortación parte con un “quiero recordaros” (v. 5), mencionando que el Señor salvó a Israel de Egipto, pero destruyó a los que no creyeron, condenó a los ángeles que no guardaron su dignidad a prisiones eternas, y castigó a Sodoma y Gomorra por sus vicios con fuego (v. 7). Judas concluye con un “¡ay de ellos!” (v. 11) y una exhortación a la iglesia a recordar las palabras de los apóstoles y perseverar en la verdad.

La Intensidad de Juan

El tratamiento que hace Juan en sus epístolas no es menos intenso, pero expone más ampliamente las características de los falsos maestros y sus enseñanzas, así como el remedio para combatir el error y los falsos maestros. Juan enfatiza que la unión con el Padre debe ser probada por la evidencia de buenas obras. Obras que son medibles, observables y manifiestas, pues este tipo de fe práctica es la que ellos recibieron:

“Lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que vosotros también tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.” (1 Jn. 1:3).

Esto implica que el camino para sostenerse es por medio de la unidad en la doctrina recibida.

Juan exhorta a no amar al mundo ni las cosas del mundo (1 Jn. 2:15), sino a vivir una fe activa y práctica:

“No amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.” (1 Jn. 3:18).

Exhorta a no creer a todo espíritu (1 Jn. 4:1), a buscar una fe basada en la verdad confesional de Cristo (1 Jn. 4:15), a guardarse de la idolatría (1 Jn. 5:21), a mantener la perseverancia en la doctrina del evangelio (2 Jn. 9), y finalmente a ejercitar el discernimiento a través de examinar el ejemplo de vida de los creyentes buenos como Gayo (3 Jn. 5) y los malos ejemplos de vida y servicio como el de Diotrefes (3 Jn. 9).

Conclusión

De esta manera, las epístolas de Juan y Judas son un compendio de instrucción práctica para discernir el error, tratar a los falsos maestros y animar a la iglesia a mantenerse fiel en la fe. La urgencia y el énfasis en la verdad recibida, junto con la necesidad de una vida de obediencia y buenas obras, son fundamentales para enfrentar las enseñanzas erróneas y proteger la pureza doctrinal y moral de la iglesia.

Bibliografía

• Benware, Paul N. Panorama del Nuevo Testamento. Editorial Portavoz, 1993.
• Carson, D. A., & Moo, D. J. Una introducción al Nuevo Testamento. Editorial Clie, 2008.
• MacArthur, J. Biblia de Estudio MacArthur. Nashville, TN: Thomas Nelson, 1997.