¿Qué tan importante es tener la perspectiva correcta del gobierno de la iglesia?
Tener una perspectiva correcta del gobierno de la iglesia es importante por dos razones: la primera tiene que ver con una disposición de obediencia a Dios, pues como creyentes tenemos un llamado claro y enfática la sumisión al liderazgo de la iglesia (He. 13:17), la segunda razón, tiene que ver con la búsqueda de los beneficios que Dios ha provisto para los creyentes en el gobierno de la iglesia (1 Pe. 5:2-3).
La biblia enseña que los creyentes al ser salvados son añadidos por el Señor a la iglesia (Hch. 2:47b), luego, su santificación, el desarrollo de sus dones, el servicio al cuerpo de Cristo y todo lo que sucede con el creyente tiene relación con esta comunidad de creyentes, siendo una orden imperativa la obediencia y sumisión a sus pastores (Heb. 13:17, 1 Ts. 5:12), de esto deriva una de las razones de tener una perspectiva correcta del gobierno de la iglesia, porque si no entendiéramos correctamente el gobierno de la iglesia, tampoco sabríamos como obedecer a la Palabra en el contexto de Hebreos 13:17 y 1 Tesalonicenses 5:12.
Por otra parte, la biblia también nos enseña lo que un creyente debe esperar bajo el gobierno de la iglesia o de quienes la lideran en beneficio de los creyentes. Dios ha provisto para los creyentes los beneficios de ser apacentados (Hch. 20:28), cuidado y protección (1 Pe. 5:2), de tener ejemplos de piedad (1 Ti. 4:12), vivir en una comunidad ordenada y con disciplina (2 Ti. 4:2, Tit. 2:15), y con lideres que trabajan intensa y desinteresadamente por la salude espiritual de la congregación como quienes deben rendir cuenta ante Dios (Heb. 13:17). Pero quienes no tengan una perspectiva correcta del gobierno de la iglesia, carecen de las herramientas para evaluar el lugar en donde se congregan y podrían no estar disfrutando de estos beneficios espirituales que Dios ha provisto para la iglesia.
Ahora bien, en cuanto al gobierno de la iglesia uno puede observar un abanico de opciones, que van desde lugares donde se practica intencionalmente un no gobierno de la iglesia, con la desaprobación de cualquier liderazgo con autoridad sobre otros; y en el otro extremo, donde existe un liderazgo que reclama autoridad suprema sobre la iglesia, como es el caso de la iglesia católica. En medio de estos dos extremos tenemos una serie de opciones con matices. Berkhof en su Teología sistemática menciona 5 tipos de gobierno (p.692) resaltando el gobierno presbiteriano como el modelo que más se acerca a las escrituras. Por otro parte, en su libro «La membresía de la Iglesia», Jonatahn Leeman afirma que el foco no debe estar en un modelo de gobierno estandarizado, pues cada iglesia tiene contextos diferentes. Y la teología sistemática de MacArthur sostiene un punto de equilibrio al dirigir nuestra atención al énfasis que las escrituras hacen a cerca del gobierno de la iglesia son énfasis en la pluralidad de ancianos. Finalmente, mi opinión en cuanto a esto es que los creyentes no debemos innovar o tratar de forzar a las Escrituras más allá de la comprensión natural de los textos que hablan del gobierno de la iglesia. Pasajes como Tito 1:5, 1 Timoteo 5:17, Santiago 5:4, Filipenses 1:1 y 1Ped 5:1-3, son todos textos que hablan de la figura de varios ancianos sobre las iglesias, sin que exista, a pesar de la presencia de los apóstoles, jerarquías de dependencia posterior a la plantación de la iglesia. Entonces bajo estas evidencias, confío en que el modelo de iglesias autónomas con pluralidad de ancianos es el diseño que más beneficios trae a una congregación para ser alimentada, protegida y guiada en el cumplimiento de la gran comisión.